¿Cuál es la distancia correcta entre las plantas de cannabis en el cuarto de cultivo?
Las plantas de cannabis también deben estar separadas una cierta distancia para desarrollarse de forma saludable. La cuestión que se plantea es cómo colocar las plantas en el cuarto de cultivo y en qué cantidad. Y, efectivamente, es una cuestión importante, porque el espaciado de las plantas es un factor clave para el éxito del cultivo. A continuación, profundizaremos en este tema:
En primer lugar, depende del tamaño de la zona de cultivo y del espacio disponible. Dependiendo de la variedad de cannabis que se cultive, el espacio necesario por planta puede variar entre 0,3 m² y 1m². Por supuesto, también hay factores decisivos como las macetas, la iluminación y la ventilación. Pero más adelante hablaremos de ello.
Las plantas deben tener siempre suficiente distancia con las plantas vecinas para que no haya más problemas. Un armario de cultivo abarrotado es perjudicial para las plantas y su desarrollo. A medida que las hojas y las ramas de las plantas de cannabis crecen hacia y sobre las demás, se vuelven más húmedas y pierden la capacidad de transpirar eficazmente. Como resultado, se favorece la aparición de moho y la infestación de plagas, por ejemplo, de trips o arañas rojas. Este problema se agrava si la regulación de la temperatura y la humedad es insuficiente y la ventilación es deficiente.
Es mejor dejar un espacio de al menos 10 cm entre las plantas. De este modo, las plantas pueden desarrollarse sin ser molestadas.
Macetas y tamaño de las plantas
Normalmente, cuanto más grande sea la maceta, más grandes crecerán las plantas. Al principio, cuando las plantas son todavía pequeños plantones, basta con una pequeña maceta de 0,25-0,5 L. Más tarde, cuando crecen y ganan altura, la variedad determina el tamaño de la maceta: dependiendo de si se cultiva una Indica tupida y de bajo crecimiento o una Sativa larga.
- Las macetas cuadradas ayudan a ahorrar espacio
Si quieres cultivar plantas de sólo unos 80 cm de altura, necesitas macetas con un volumen de unos 3,7 litros. Si las plantas van a crecer más alto, se recomienda utilizar macetas con un volumen de 8-18 litros.
La luz y el tamaño de la planta
La iluminación debe diseñarse de forma que la mayor cantidad de luz posible incida en todas las partes de las plantas. Para ello es necesario un reflector de alta calidad que garantice una distribución uniforme de la luz. Además, las paredes del cuarto de cultivo o de la carpa de cultivo deben estar hechas o cubiertas con una película o revestimiento altamente reflectante. De este modo, se puede aprovechar al máximo la luz disponible y ahorrar mucha energía al mismo tiempo.
Las lámparas de doble extremo pueden producir un tercio más de intensidad luminosa que las lámparas NDL convencionales. Sin embargo, debido al elevado calor generado, estas lámparas también deben colgarse a suficiente altura por encima de las puntas de las plantas.
Si una gran parte de las plantas de cannabis se hace sombra entre sí, esto también influirá (negativamente) en el desarrollo de las plantas. Como resultado, habrá menos tricomas y menos flores grandes. El crecimiento de las plantas se ralentizará y las enfermedades aparecerán más fácilmente. Si notas que tus plantas se dan sombra unas a otras, es el momento de separarlas más.
Circulación de aire y ventilación
Todo cuarto de cultivo necesita al menos un ventilador oscilante, dependiendo del tamaño. Todas las partes de las plantas deben estar cubiertas por una ligera corriente de aire. El aire estancado puede tener un efecto negativo en las plantas y hacer que las hojas estén demasiado húmedas. Si algunas partes del cuarto de cultivo no tienen suficiente flujo de aire, debe colocar las plantas más separadas e instalar un segundo (tercer, cuarto....) ventilador si es necesario.
Un ventilador suficientemente dimensionado transporta constantemente el aire viciado y la humedad fuera del cuarto de cultivo. Para un crecimiento sano y fuerte, un ventilador es indispensable para el cultivo de interior.
Cada planta es única
Al fin y al cabo, cada planta de cannabis y cada variedad es única en cuanto a forma, altura, necesidades, espacio y dimensiones. En cualquier caso, asegúrese de obtener un buen resultado procurando que las plantas no se toquen entre sí. Adapte el espaciado varias veces durante el cultivo para mantener sus plantas sanas y felices.
Espaciamiento de las plantas con el método Scrog
El uso de redes scrog y en espaldera se ha hecho muy popular y, al igual que el método Sea-Of-Green, es utilizado por muchos cultivadores. Con estos métodos, a veces puede ser difícil garantizar un espacio suficiente entre las plantas de cannabis. La malla y un espacio de cultivo abarrotado en general comprimen las ramas de las plantas y crean condiciones óptimas para la propagación de plagas y patógenos.
Al mismo tiempo, la red scrog también puede utilizarse para mantener separadas las ramas y las hojas y para mover las plantas en la dirección deseada. Puede ayudar a que las plantas no crezcan demasiado densas y a que la luz y el aire puedan llegar a todas las partes de la planta. Con el método scrog, siempre es aconsejable utilizar un segundo ventilador oscilante en la zona del suelo (por cada 1 m²) para que se garantice una aireación suficiente.
Las hojas de la parte inferior de las plantas que reciben poca o casi ninguna luz y reducen la circulación del aire deben eliminarse en cualquier caso. En nuestro artículo Lollypopping aprenderás cómo hacerlo exactamente y en qué fase.
- Independientemente del método de cultivo, es ventajoso mantener la humedad en un 50-56% si es posible.
- Revise las plantas con regularidad y corte o ate las ramas que se solapen para que las plantas no se toquen.
Un buen consejo:
Es aconsejable tener plantas más grandes y en menor cantidad. Cada planta debe tener espacio suficiente para que reciba toda la luz. Es difícil dar una fórmula exacta para el número de macetas en un espacio de cultivo correspondientemente grande y sigue siendo muy general. Depende, entre otras cosas, de la calidad e intensidad de la luz. Es muy probable que se puedan colocar más plantas bajo una lámpara de doble casquillo de 600W que bajo una lámpara NDL ordinaria de 600W. Lo mismo ocurre con las lámparas LED, en las que el rendimiento, el espectro luminoso y la calidad de los componentes y chips individuales son muy importantes.
Estos factores determinan el número de plantas que puede colocar bajo un NDL de 600W o un LED comparable:
- Tipo de reflector
- Tamaño de la maceta
- La variedad de cannabis y las características de crecimiento de las plantas
- ¿Se podan las plantas?
- Control de las condiciones de cultivo (temperatura, circulación del aire, humedad, intercambio de aire)